
Qué es Signal, la aplicación en la que el equipo de Trump compartió planes militares a un periodista

Signal es una plataforma de mensajería encriptada utilizada por millones de personas en el mundo, incluidos periodistas y funcionarios.
Sin embargo, el relato del redactor jefe de la revista The Atlantic, Jeffrey Goldberg, que fue agregado a un chat grupal en el que funcionarios de la Administración Trump discutían temas sensibles de seguridad nacional ha generado alarma y preguntas sobre cómo se supone que debe manejarse esta información.
"Organización sin fines de lucro"
Es una aplicación de mensajería instantánea que podría funcionar como una alternativa a WhatsApp o Telegram, en la que están disponibles chats directos y grupales, así como llamadas y videollamadas.

La aplicación no pertenece a ninguna empresa tecnológica y se autodomina una "organización sin ánimo de lucro" que se financia a través de donaciones y subvenciones de personas "que valoran la privacidad", según su página web.
Su mayor atractivo es la máxima privacidad que ofrece. Signal utiliza cifrado de extremo a extremo denominado Open Whispers Systems para sus servicios de mensajería y llamadas, lo que impide que terceras personas vean el contenido de las conversaciones o escuche las llamadas. Es decir, los mensajes y llamadas salen de un móvil ya cifrados y solo se descifran cuando llegan al destinatario.
El protocolo de cifrado de Signal es de código abierto, por lo que cualquier desarrollador lo puede inspeccionar, usar y modificar libremente para hacerlo más segura. Además, su cifrado está activado por defecto.
Su funcionamiento es similar al de otras aplicaciones de mensajería instantánea, con la característica de que es necesario ingresar un PIN de seguridad, con el que la cuenta de Signal quedará cifrada dentro de los servidores de la aplicación para que nadie pueda leer las conversaciones. Por lo demás, es exactamente igual a las demás permite a los usuarios realizar llamadas de voz, enviar audios, fotos, GIFs, archivos, contactos y la ubicación. También es posible organizar chats grupales con hasta 1.000 personas e incluso los mensajes se pueden configurar para que desaparezcan automáticamente después de un cierto tiempo, que se puede configurar desde 5 segundos hasta una semana.
Más seguro que los mensajes de texto convencionales
Según AP, si bien la aplicación promueve la privacidad de su servicio, y los expertos coinciden en que es más seguro que los mensajes de texto convencionales, esta puede ser hackeada.
Un exfuncionario de Seguridad Nacional que sirvió durante la Administración Biden comentó a AP que los funcionarios del Gobierno tenían permiso para descargar la aplicación en sus teléfonos entregados por la Casa Blanca, pero fueron instruidos para usarla con moderación. Según el empleado, Signal se usaba más comúnmente para notificar a alguien que debía revisar un mensaje clasificado enviado por otros medios.
Una revisión del medio revela que funcionarios estatales, locales y federales en casi todos los estados tienen cuentas en aplicaciones de mensajería cifrada, la mayoría registradas con números de teléfonos celulares del Gobierno.
Esta aplicación tiene sus orígenes en la década de 2010, cuando el investigador de ciberseguridad Moxie Marlinspike, que fue brevemente jefe de seguridad de productos en Twitter, lanzó dos plataformas de código abierto existentes basadas en Signal Protocol, una para mensajes de texto y otra para llamadas de voz.
Signal ha sido una aplicación muy valorada por personalidades expertas en el ámbito de la seguridad informática, como el excolaborador de la CIA y de la Agencia de Seguridad Nacional de EE.UU., Edward Snowden, que en 2015 reveló que usa Signal "cada día".
- Según Goldberg, el 11 de marzo recibió una solicitud de conexión en Signal de un usuario identificado como Michael Waltz y la aceptó. El 13 de marzo lo agregaron al chat denominado 'Grupo pequeño de PC hutíes', en el que, además de Waltz, estaban presentes el secretario de Defensa, Pete Hegseth, el vicepresidente de EE.UU., James D. Vance, y el secretario de Estado, Marco Rubio, entre otras 18 personas.
- Conforme a sus palabras, los altos funcionarios estadounidenses discutieron allí varios problemas y retos acerca del lanzamiento de una operación militar en Yemen dos días antes de que esta fuera anunciada oficialmente y llevada a cabo.