Satanistas podrían atender a estudiantes en escuelas de EE.UU.
Los miembros de la organización religiosa Templo Satánico han exigido el derecho a enseñar en las escuelas del estado estadounidense de Florida en igualdad de condiciones que otras confesiones. Recibieron tal oportunidad después de que el gobernador Ron de Santis firmara una ley que permite a voluntarios de entidades religiosas atender consultas en centros educativos, informó la prensa local.
Legislación ambigua
El lunes entró en vigor la Ley HB 931, firmada por el gobernador en mayo, que permite a los capellanes voluntarios ofrecer apoyo, servicios y programas a los estudiantes en las escuelas públicas de Florida. Los proyectos establecen que los padres elijan al capellán para su hijo de una lista de voluntarios, que serían sometidos a una verificación de antecedentes.
Al firmar la ley, de Santis dejó claro que su intención era devolver los principios del cristianismo al sistema educativo público. La normativa ha desatado un polémico debate sobre la libertad religiosa y la separación entre iglesia y estado. Y es que la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos prohíbe el establecimiento o la promoción de cualquier religión en particular, algo de lo que la organización satánica decidió aprovecharse.
Anunciaron su disposición a participar ya hace tiempo, cuando Lucien Greaves, cofundador y portavoz del grupo, mencionó que quieren que el público sepa "de antemano que ese puede ser el resultado de estos proyectos de ley". Sin embargo, Ron de Santis declaró en la firma del proyecto de ley que Templo Satánico no cumpliría los requisitos para proporcionar capellanes, ya que "eso no es una religión".
Continúa el enfrentamiento
Por su parte, la organización no está dispuesta a rendirse y reiteró este martes su participación en el programa de Ron de Santis. Insisten en que no hay nada en el texto de la ley que se lo impida.
"Al aprobar el proyecto de ley de capellanes escolares como ley, el incompetente gobernador, Ron de Santis, obsesionado con la guerra cultural en Florida, mintió abiertamente al público y declaró que no se permitirían capellanes satánicos", declaró Lucien Greaves a Fox News.
"En lo más profundo de su ignorancia, no reconoce una obviedad constitucional básica y fundamental: no corresponde al gobierno dictar que unas religiones tengan ciertos derechos sobre otras", continuó.