La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil de España ha desmantelado una pujante organización delictiva que importaba cocaína de Latinoamérica a través de contenedores marítimos que descargaba en puertos de Portugal.
Bajo el nombre de 'Operación Olimpia', se han producido una docena de detenciones tan solo esta semana.
Las indagaciones comenzaron en septiembre, cuando se tuvo conocimiento de la existencia de una red que distribuía la droga en la provincia gallega de Pontevedra y que cruzaba la frontera portuguesa con asiduidad.
Del puerto por carretera a las 'guarderías'
Durante estos meses los agentes descubrieron el operativo utilizado por la red narcotraficante. Ocultaban alijos en envíos legales de piel de bovino procedentes de Sudamérica, según explica La Voz de Galicia.
Cuando la mercancía llegaba a las costas Portuguesas, era trasladada por carretera a la provincia española de Pontevedra, oculta en vehículos especialmente preparados para ello. Allí se repartía entre una numerosa red de inmuebles utilizados a modo de 'guarderías' donde se custodiaban hasta que llegase el momento de su distribución.
Los tentáculos de la red se extendían por buena parte de la geografía española. De hecho, las detenciones llevadas a cabo por la Guardia Civil se produjeron en Pontevedra, Ourense, Madrid, Barcelona, Zamora y Guadalajara.
Entre los integrantes de la organización se encontraban ciudadanos españoles, colombianos, dominicanos y portugueses.
En el marco de las diferentes actuaciones integrantes de la Operación Olimpia se detuvo a 19 personas, se realizaron 32 registros y se intervinieron 2.232 kilos de cocaína, 150.000 euros en efectivo, inhibidores de frecuencia, teléfonos satelitales, básculas de precisión, un arma corta simulada, una plantación de marihuana, dos vehículos de alta gama, 17 móviles encriptados y diversa documentación.
De las 12 personas que fueron detenidas entre el miércoles y el jueves de esta semana, nueve han pasado a disposición judicial este viernes, mientras que las otras tres fueron puestas en libertad.
La operación de la UCO se desarrolló con la colaboración del Departamento de Investigación Criminal de la Policía Judiciària portuguesa, la Europol, la DEA norteamericana y autoridades de la República Dominicana.