Las elecciones legislativas de la provincia de Buenos Aires provocaron un sismo político de escala nacional en Argentina, ya que el partido del presidente, Javier Milei, sufrió una dura derrota que lo obligará a modificar su estrategia de Gobierno.
Con el 99 % de las mesas escrutadas, al amanecer de este lunes la coalición peronista Fuerza Patria (FP) ganaba la elección con el 47,2 % de los votos, en tanto que el partido de Milei, La Libertad Avanza (LLA), alcanzaba 33,7 %. Esos resultados son positivos para el gobernador opositor, Axel Kicillof, quien se consolidó como precandidato presidencial del peronismo para 2027.
La distancia de 13,5 puntos le da una clara hegemonía al peronismo y lo vuelve a posicionar como la principal fuerza política adversaria del Gobierno. Sin embargo, ahora hay alternancia de liderazgos: Kicillof desplaza a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien celebró desde el balcón de la casa donde cumple prisión domiciliaria.
🇦🇷Cristina Fernández de Kirchner sale al balcón de su residencia para saludar a los cientos de simpatizantes que se reunieron frente a su casa tras el triunfo peronista en las elecciones provinciales de Buenos Aires https://t.co/YmGD2Iq1Yzpic.twitter.com/NwbzXOn1UW
— RT en Español (@ActualidadRT) September 8, 2025
La victoria se acrecienta simbólicamente porque, durante la campaña, los voceros del oficialismo pronosticaron que la elección sería "el último clavo al cajón del peronismo". También usaron el lema "Kirchnerismo nunca más", lo que provocó una oleada de repudio, ya que se apropiaba del título del informe de los crímenes de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar (1976-1983).
En cuanto se conocieron los primeros resultados, la oposición le dio la vuelta al vaticinio oficialista: "Más peronismo y kirchnerismo que nunca". De este modo, ya tienen lema para la campaña rumbo a las elecciones legislativas nacionales del próximo 26 de octubre.
Crisis
Las elecciones concitaban un interés especial porque el padrón de 14 millones de votantes convierte a la provincia de Buenos Aires en el distrito con mayor peso, en un país con 45 millones de habitantes. De este modo, se consideraban una suerte de termómetro para el Gobierno y para el liderazgo que emerge en la oposición.
Con el triunfo de hoy queda confirmado que en Argentina hay otro camino y hoy empezamos a recorrerlo.Sabemos muy bien la responsabilidad que nos toca, que no alcanza con criticar ni con oponerse. Durante meses nos dijeron que arrasaban, que iban a pintar la provincia de violeta… pic.twitter.com/kBQISJamQh
— Axel Kicillof (@Kicillofok) September 8, 2025
El resultado fue negativo para Milei, quien busca la reelección en 2027. Además, el mandatario se involucró de lleno en la campaña provincial, por lo que esta cobró tintes nacionales.
No obstante, los escándalos enturbiaron la víspera de los comicios. La filtración de audios que involucran a la hermana del mandatario y secretaria general de la presidencia, Karina Milei, en presuntos actos de soborno, melló la promesa de honestidad de LLA. La causa sigue en tribunales, pero la sombra de las supuestas coimas parece haber pasado factura.
A todo ello se le sumó un clima de incertidumbre económica. La semana antes del comicio, el Gobierno intervino el mercado cambiario, a pesar de que había dicho que esto no ocurriría, en línea con su ideología libertaria.
Este lunes, la prensa argentina amaneció colmada de especulaciones sobre las medidas concretas o posibles cambios de gabinete en el Gobierno de Milei, quien la noche del domingo aceptó la derrota en un inusual tono sereno. No obstante, advirtió que profundizará su programa de gestión.
Victoria
Por el contrario, el peronismo se ha reordenado, con miras a las legislativas del próximo mes y las presidenciales de 2027.
Kicillof, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, fue el gran ganador de la noche, ya que consolidó su liderazgo al interior del peronismo. A él se le considera responsable del diseño y la estrategia electoral que culminó con el triunfo de tintes "históricos", ya que el movimiento no ganaba las legislativas intermedias en la provincia desde hace 16 años.
A pesar de las resistencias de su partido, el gobernador defendió que las elecciones se realizaran en una fecha distinta a los comicios nacionales del 26 de octubre, lo que le valió un fuerte enfrentamiento con Fernández de Kirchner y con su hijo, el diputado Máximo Kirchner.
Finalmente ambos acordaron la unidad con el resto de los grupos peronistas, lo que fue fundamental para ganar el domingo.
