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EE.UU. moviliza a sus aliados para combatir al Estado Islámico en Irak y en Siria
EE.UU. ha empezado a movilizar a una amplia coalición de sus aliados ante una posible operación militar en Siria contra el Estado Islámico y ante el aumento de los ataques aéreos sobre el norte de Iraq, según los representantes de la Casa Blanca.
El presidente estadounidense, Barack Obama, está extendiendo su campaña contra los milicianos sunitas del Estado Islámico (EI) en Irak y Siria y además está a un paso de aprobar la distribución aérea de agua y alimentos en la region de la ciudad Amerli, situada en el norte de Irak, donde vive la minoría turcomana de Irak, según representantes de la Casa Blanca citados por el diario estadounidense 'The New York Times'.
"Mientras Obama contempla nuevos ataques, la Casa Blanca inició su campaña diplomática para recabar aliados y vecinos de la región que puedan aumentar su apoyo a la oposición moderada de Siria y, en algunos casos, proporcionar apoyo en las posibles operaciones militares de EE.UU. Entre los países proclives a alinearse están Australia, Reino Unido, Jordania, Qatar, Arabia Saudita, Turquía y los Emiratos Árabes Unidos", escribe el diario citando a fuentes oficiales bajo condición de anonimato.
Además, se subraya que es muy probable que Reino Unido y Australia estén dispuestos a unirse a EE.UU. en una eventual campaña aérea. Los funcionarios dijeron que también esperan que Turquía, que cuenta con bases militares que podrían ser utilizadas durante las operaciones en Siria, preste su apoyo.
Turquía es una ruta de tránsito para los combatientes extranjeros, entre ellos los de EE.UU. y Europa que viajan a Siria para unirse al EI. Según el diario, Washington espera que Ankara aumente el control de la frontera. Además el Gobierno estadounidense está buscando el apoyo en inteligencia y vigilancia de Jordania, así como la ayuda financiera de Arabia Saudita.
Este lunes el Pentágono comenzó a efectuar vuelos de vigilancia sobre Siria en un esfuerzo para localizar potenciales blancos de ataques aéreos contra las milicias del EI.
Sin embargo, convencer a los aliados que le ayuden en su campaña militar en Siria no será una tarea fácil para EE.UU., escribe el diario. De hecho, mientras Turquía se encuentra ahora en medio de una transición política, Arabia Saudita y los emiratos del Golfo Pérsico son importantes fuentes de financiación de los rebeldes, aunque hay desacuerdos entre ellos. Qatar, por ejemplo, ayudó a negociar la liberación del estadounidense Peter Theo Curtis, que fue detenido por el Frente Nusra. Por su parte, Arabia Saudita no negocia con el Frente Nusra, mientras Washington trata de "navegar" entre los países del golfo que están en disputa.
"Mientras Obama contempla nuevos ataques, la Casa Blanca inició su campaña diplomática para recabar aliados y vecinos de la región que puedan aumentar su apoyo a la oposición moderada de Siria y, en algunos casos, proporcionar apoyo en las posibles operaciones militares de EE.UU. Entre los países proclives a alinearse están Australia, Reino Unido, Jordania, Qatar, Arabia Saudita, Turquía y los Emiratos Árabes Unidos", escribe el diario citando a fuentes oficiales bajo condición de anonimato.
Además, se subraya que es muy probable que Reino Unido y Australia estén dispuestos a unirse a EE.UU. en una eventual campaña aérea. Los funcionarios dijeron que también esperan que Turquía, que cuenta con bases militares que podrían ser utilizadas durante las operaciones en Siria, preste su apoyo.
Turquía es una ruta de tránsito para los combatientes extranjeros, entre ellos los de EE.UU. y Europa que viajan a Siria para unirse al EI. Según el diario, Washington espera que Ankara aumente el control de la frontera. Además el Gobierno estadounidense está buscando el apoyo en inteligencia y vigilancia de Jordania, así como la ayuda financiera de Arabia Saudita.
Este lunes el Pentágono comenzó a efectuar vuelos de vigilancia sobre Siria en un esfuerzo para localizar potenciales blancos de ataques aéreos contra las milicias del EI.
Sin embargo, convencer a los aliados que le ayuden en su campaña militar en Siria no será una tarea fácil para EE.UU., escribe el diario. De hecho, mientras Turquía se encuentra ahora en medio de una transición política, Arabia Saudita y los emiratos del Golfo Pérsico son importantes fuentes de financiación de los rebeldes, aunque hay desacuerdos entre ellos. Qatar, por ejemplo, ayudó a negociar la liberación del estadounidense Peter Theo Curtis, que fue detenido por el Frente Nusra. Por su parte, Arabia Saudita no negocia con el Frente Nusra, mientras Washington trata de "navegar" entre los países del golfo que están en disputa.
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