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Irán intensifica la producción de uranio
Irán inaugura este martes dos instalaciones de extracción y procesamiento de uranio en la provincia central de Yazd, informa Press TV.
Las instalaciones son un centro de extracción de mineral de uranio en Saghand, y un complejo de producción de pasta amarilla de uranio.
Durante la ceremonia de inauguración, el presidente iraní, Mahmoud Ahmadinejad, dijo por videoconferencia que la industria nuclear del país está en desarrollo y que la nación iraní es testigo a diario de nuevos logros en este campo.
El programa nuclear de la república islámica es objeto de gran controversia internacional. Algunos países, EE.UU. incluido, sospechan abiertamente que Teherán está utilizando el programa como cobertura para fabricar armas nucleares en secreto. Irán objeta por su parte que sus esfuerzos en materia nuclear tienen un carácter puramente civil y que son imprescindibles para la producción de energía, así como para la investigación y los dispositivos médicos.
El año pasado Washington y sus aliados impusieron sanciones severas a Irán como medio de presión para que la república islámica desmantele su programa de enriquecimiento de uranio. La economía de Irán se resiente bajo las sanciones, pero el país sigue insistiendo que no va a renunciar a su derecho a desarrollar un programa nuclear pacífico.
Irán y un grupo de negociadores internacionales conocidos como el P5 +1 celebraron la última ronda de conversaciones nucleares en Kazajistán la semana pasada. La reunión no logró avances reseñables ni consiguió reducir las tensiones.
La noticia de la puesta en marcha de las nuevas instalaciones podría ser una respuesta de Teherán a la ronda fracasada de negociaciones, estiman los analistas.
Durante la ceremonia de inauguración, el presidente iraní, Mahmoud Ahmadinejad, dijo por videoconferencia que la industria nuclear del país está en desarrollo y que la nación iraní es testigo a diario de nuevos logros en este campo.
El programa nuclear de la república islámica es objeto de gran controversia internacional. Algunos países, EE.UU. incluido, sospechan abiertamente que Teherán está utilizando el programa como cobertura para fabricar armas nucleares en secreto. Irán objeta por su parte que sus esfuerzos en materia nuclear tienen un carácter puramente civil y que son imprescindibles para la producción de energía, así como para la investigación y los dispositivos médicos.
El año pasado Washington y sus aliados impusieron sanciones severas a Irán como medio de presión para que la república islámica desmantele su programa de enriquecimiento de uranio. La economía de Irán se resiente bajo las sanciones, pero el país sigue insistiendo que no va a renunciar a su derecho a desarrollar un programa nuclear pacífico.
Irán y un grupo de negociadores internacionales conocidos como el P5 +1 celebraron la última ronda de conversaciones nucleares en Kazajistán la semana pasada. La reunión no logró avances reseñables ni consiguió reducir las tensiones.
La noticia de la puesta en marcha de las nuevas instalaciones podría ser una respuesta de Teherán a la ronda fracasada de negociaciones, estiman los analistas.
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