¿Un trato suave para la 'maltratadora del tabasco'?
La sentencia dictada a la norteamericana Jessica Beagley, declarada culpable por maltratar a su hijo adoptivo ruso, fue calificada por varios defensores de los derechos humanos como "suave". Un tribunal de Anchorage, en el estado norteamericano de Alaska decretó libertad condicional de 6 meses para la madre, apodada por los medios como "la maltratadora del tabasco". El veredicto se cumplirá solo si la culpable vuelve a cometer un delito similar.
Sin embargo, el defensor de los derechos del menor de Rusia, Pável Astájov sostuvo en declaraciones a RT que el castigo no puede ser calificado de “suave”, porque abarca justamente la mitad del plazo máximo de encarcelamiento establecido por la legislación del estado de Alaska para este tipo de crímenes. “Es una sentencia suficiente para una persona sin antecedentes penales y muchas referencias positivas”. Según el ombudsman, el entorno de Beagley no recordaba otros casos en los que la mujer tratara de manera violenta a sus hijos. “Creo que la decisión tomada por el tribunal corresponde a los intereses de los niños”, sostuvo.
Recordó también que la resolución judicial concierne no solamente al hijo adoptivo de Jessica Beagley, Daniil Bujárov, sino también a su hermano, Oleg. Tanto la legislación rusa como la estadounidense prohíben separar a los hijos adoptivos, por lo que "sería injusto privar a la mujer de la patria potestad sobre ambos hijos", estima.
El juez tuvo en cuenta todas las circunstancias atenuantes. "Realmente Beagley se arrepiente de todo, no paró de llorar y pedir perdón a lo largo de todo el proceso. Pero la condena que recibió ha sido contundente de todas maneras", estima el experto, que señaló que si una situación similar ocurriera en un país europeo o en Rusia, los castigos serían similares.
No obstante, recalcó que tras el proceso los servicios sociales del estado deberán estar pendientes de la vida de los hijos adoptivos de Beagly y advirtió que “si algo similar volviera a pasar no habría clemencia y sería desprovista definitivamente de la patria potestad sobre sus hijos”.
La resolución del caso de Beagley ha generado una fuerte polémica tanto en la sociedad rusa como a nivel mundial. Muchos esperaban una sentencia más “contundente” para una mujer que, con supuestos fines educativos, le duchaba con agua helada y le hacía tragar salsa tabasco a su hijo adoptivo Daniil Bujárov.